Fiestas de primavera por el mundo

Encargarle un artículo sobre fiestas de primavera a un alérgico, ese es el primer chiste. Meses antes de que llegue la estación de la floración y meses después de que esta se haya ido, aquí el menda gasta más kleenex que un adolescente. Me paso medio año subiendo la persiana de mis fosas nasales y, claro, al ser gallego estoy todo el día dando explicaciones, especialmente de noche. Pero no hemos venido a hablar de mí…

Polen aparte, la primavera es una estación ideal, preámbulo del verano, con una temperatura perfecta y una paleta de colores preciosa que admirar desde una buena terraza al sol vermú en mano (estoy escribiendo esto un martes, ¡qué horror!).

La llegada del tiempo de las flores se celebra en todo el mundo de maneras diversas y originales. Hoy hemos querido darnos una vuelta por el globo, para descubrir algunas de esas singulares celebraciones. ¿Te apuntas?

A ver, es de esos artículos que te invitan a viajar sin viajar, que te enseña y te habla de lugares muy chulos a los que no vas a poder ir porque cobras el salario mínimo y se te va todo el sueldo en el alquiler. Un post de los que te deja con la miel en los labios. Vaya, que estamos hechos unos calientaviajes.

Fiesta del Agua (Tailandia)

Conocida también como Songkran, que suena a héroe manga. Se trata de una festividad budista que tiene lugar entre los días 13 y 15 de abril. Sirve como arranque del Año Nuevo tailandés, pero sin Ramón García y su capa. Todo cosas buenas por ahora.

Es cierto que en tiempos de sequía hablar de una fiesta donde el principal protagonista es el agua, es como hacer una churrascada al lado del avión de ‘La sociedad de la nieve’. Un poquito una provocación. Pero sí, así funciona el Son Gohan, guerra de agua a discreción. Pistolas, jarras, cubos, mangueras… Derroche de H2O, justo lo contrario de lo que pasa en el cámping del Viña Rock. Además de eso, se realizan desfiles en los que se venera la imagen de Buda, el dios no normativo.

Buda y agua a 12 horas de avión. A nosotros no nos compensa. Next.

Hanami (Japón)

¿Qué hay más bonito que ver florecer un cerezo? Pues cualquier otra cosa si eres alérgico a su polen. Pero dejando atrás respuestas del sistema inmunitario que me dejan la nariz como una patata a medio pelar y los ojos como si hubiera cortado siete docenas de cebollas viendo Bambi, el cerezo en flor es bonito de ver.

En eso están de acuerdo los cientos de miles de japoneses que año tras año se lanzan a parques y jardines, al inicio de la primavera, para deleitarse con el florecimiento de sus sakura (cerezo en el idioma nipón).

Un cerezo en flor nos lleva a Doraemon, la infancia, bocadillo fuagrás, jugar en la calle, cero responsabilidades… Siempre a favor.

Bloemencorso Bollenstreek (Países Bajos)

Si somos sinceros esta la hemos elegido solo por el nombre. Parece que alguien se haya sentado encima del teclado para bautizar la farra primaveral del país de los tulipanes. El Bloemencorso Bollenstreek es el desfile de flores más espectacular del viejo continente y es por ello que le perdonamos tener nombre de equipo de fase previa de Champions.

En la edición de este año, la fiesta que une las localidades de Noordwijk y Haarlem, tendrá lugar el sábado 20 de abril. Más de 12 horas y 42 kilómetros de fiesta floral en la que participan una veintena de carrozas decoradas para la ocasión. Luz, color y estornudos, lo mismo que puedes encontrar en un camerino de Mediaset.

¿Sabías que Holanda es solo una región del país y que el modo correcto de llamar al estado es Países Bajos? Pues de nada. Sliwils, una vez más, divierte y enseña.

Sham el-Nessim (Egipto)

La fiesta con la que en Egipto celebran la llegada de la primavera tiene ni más ni menos que 4.500 años de antigüedad, cuando nació la celebraba Jordi Hurtado solo. El Sham el-Nessim, cuya traducción sería algo así como “oler la brisa”, escenifica la ofrenda de alimentos (pescado, verduras) a los dioses en agradecimiento por las buenas cosechas.

La tradición más rigurosa ha dejado paso a una celebración donde los protagonistas son la gastronomía, la música y el baile. Una celebración que ha unido además a musulmanes y cristianos, que festejan en parques, ríos y playas del país un evento único cada mes de abril. Una merendola premium, vaya.

La fiesta suele acabar con gente bañándose en el río; si tu idea es ir pero no ves claro lo de remojarte, Nilo intentes.

Semana Santa (España)

No podía faltar uno de los iconos patrios, la Semana Santa. El Carnaval de Cádiz del cristianismo. Cierto es que se celebra en todo el territorio, pero su cenit se vive en tierras andaluzas. Llegada la fecha, los sevillanos se dividen en dos grupos: los que se vuelven ultrarreligiosos durante esa semana para posturear en el Insta, y los que se largan a Matalascañas o Isla Cristina (Huelva) a hacer balconing para no sufrir el calvario de la Semana Santa sevillana.

¿Eres de los que solo quieren a los andaluces cuando se trata de divertirse? Pues prepárate para vivir una experiencia sin igual: procesiones, costaleros, vírgenes y cristos… No es la nueva serie de Los Javis, es la Semana Santa de Sevilla. Si quieres un consejo más, de estos humildes servidores, riégalo todo con cerveza (o Cruzcampo, si no tienen) y un montadito de pringá.

Como diría el gran poeta Francisco Javier Labandón (aka El Arrebato): “Y Sevilla, Sevilla, Sevilla…”.

El Holi (India)

Y no nos olvidamos del Holi, la fiesta hindú más popular. Lo hemos simplificado mucho, sí, pero es que a esta celebración le dedicamos un artículo íntegro hace ya algún tiempo. Y aunque somos mucho de reciclar y procrastinar, aquí nos ha podido el decoro. Aunque huelga decir que una celebración que consiste en echar polvos estará siempre entre nuestras preferidas. 

Pero si existe un buen elogio a la primavera, una fiesta viva y colorida, esa es la que montamos en Sliwils con nuestras colecciones de cordones estampados más primaverales: la Fresh y la Holi.

No seas tan primaveras de cambiarte las zapatillas: cámbiales los cordones y renuévalas con Sliwils. Nada más, voy a por el quinto antihistamínico de la mañana.

P. D.: Sí, hemos publicado un post sobre la llegada de la primavera a día 7 de marzo, cosas del calentamiento global. Unos añitos más y lo publicaremos en Navidad.