Estilos de música más famosos del mundo

En el universo hay dos reglas absolutas: que la materia no puede surgir de la nada y que a todo dios nos gusta la música. Y por “todo dios” nos referimos a todo el mundo de la totalidad. Hasta nuestra abuela se arrancó con un bailoteo en la silla de ruedas en Navidad, cuando se hincó media botella de Anís del Mono (la humareda que formó al día siguiente, cuando la incineramos… ¿Has visto Chernobyl?).

La música es el idioma en el que se comunican los dioses con los humanos, el vehículo para desprender y elevar nuestro espíritu de esta carcasa material y decrépita llamada cuerpo, la… Bueno, ya lo has pillado.

Como melómanos (amantes de la música, para los de Tik-Tok), teníamos muchas ganas de hablar de los estilos de música más conocidos en el mundo, analizándolos desde la visión ecuánime (imparcial, para los de Tik-Tok) que nos caracteriza en Sliwils.

Indie

El indie, o “independiente”, no es un estilo musical en sí mismo: es el saco donde se mete toda la música alternativa, la que se mueve lejos de los círculos de sellos y discográficas. Decir que tienes una banda indie es mejor que decir que sois unos muertos de hambre que no pueden ni comprarse instrumentos en condiciones.

Lo paradójico es que el fan del indie es de los que se van a picar teclas a un Starbucks, con un café de “leche” de avena y una magdalena azul por 20 €. También canta a la legua porque confunde “independiente” con “mainstream”, y no eres lo bastante “cool” si no has oído hablar de grupos que, PRECISAMENTE, no conoces porque son INDEPENDIENTES.

En definitiva, el indie es un cajón de sastre musical que gana fans con la velocidad a la que sus grupos desaparecen al acudir a los grandes festivales.

Ska

Después del indie, tenemos el ska, nacido en los años 50-60 de la fusión de música afroamericana y ritmos caribeños. Por cierto, este estilo es precursor de otro muy conocido, el reggae, solo que sin letras homófobas.

La indumentaria de los seguidores del ska suele tener elementos de color blanco y negro, como símbolo antirracismo. En el ska el único color que importa es el del forro de la bomber, sobre todo, el naranja…

Este estilo de música está muy vinculado con la gente políticamente a la izquierda, los que leen a Marx o Bakunin pero no quitan la clave al wifi del chalecito en Galapagar. Posiblemente, uno de los grupos de ska más conocidos en España sea Ska-P, a quienes un servidor vio una vez por el simbólico precio de 50 € (vale, fue en París, pero yo… tenía una banda indie en aquel Erasmus).

Electrónica

Posiblemente haya más subgéneros de música electrónica que hijos de Julio Iglesias. Bueno, igual hemos exagerado un poco.

En la electrónica encajan el break-beat, techno, house, dance, drum and bass, electro… Todos reunidos bajo los conceptos “bacalao”, “maquineo”, “chunda-chunda”, “chimpún-chimpún” y otras onomatopeyas con Ch-.

Este estilo de música ha reunido a gente de diversa índole y clases sociales, desde los chonis de break-beat y fuente en el parque, hasta los niños de papá que se van de house a las discotecas más tops, a pagar 30 € por una botellita de agua. Más o menos el precio de lo que cuesta hoy el litro de aceite por falta de lluvia.

Pop

Cuando haces "pop", ya no hay… Perdón, perdón. No volverá a pasar. Vamos al lío.

A mediados del siglo XX llegaba desde Estados Unidos e Inglaterra un estilo que, con una aparente facilidad, nos pondría a todos a mover el esqueleto hasta el día de hoy. Bueno, hasta el día en que llegó el reggaetón, pero de eso ya hablaremos luego.

Si es que de los EE UU y el Reino Unido, salvo la gastronomía, la geopolítica y el capitalismo salvaje, solo nos han llegado cosas buenas. ¿Qué haríamos sin los Beatles? A ver, haríamos lo mismo que ahora, pero es que son los Beatles. Los 4 de Liverpool. John y los demás. Los escarabajos. Por cierto, los fans de los Beatles que los adulan, ¿son escarabajos peloteros?

Aun con todo, la música pop es probablemente el género más injustamente denostado. Relacionado con lo meramente comercial, su valor se ha reducido siempre a la chanza y la burla. Se vincula a emisoras de radio “mainstream” que emiten música como quien tira pienso en una macrogranja. A cholón.

Y aquí vamos a romper una lanza a favor del pop, ya que sin él nos habríamos perdido a GRUPAZOS como: Iguana Tango, Pignoise, El sueño de Morfeo, Guaraná, La Caja de Pandora o Melón Diesel.

Jazz

“El jazz no es un estilo de música, el jazz es un estilo de vida”. Esta y otras frases de flipado podría pronunciarlas tranquilamente un amante del género. Pero no solo de pedantes está hecho el jazz, afortunadamente, pues para apreciarlo basta con tener gusto, sensibilidad y cierta inquietud intelectual. Cierta inquietud intelectual quiere decir que puedes gozar del jazz aunque se te esté atragantando 4º de la ESO. Sin presión.

Nace a finales del siglo XIX en Nueva Orleans, y en muy poco tiempo se convierte en una seña de identidad de la cultura afroamericana. Porque sí, el jazz es una merienda de negros. Una merienda en la que mandan el swing y la improvisación, una merienda que seguro acaba en cena. Una merienda en la que todos querrían estar, menos nosotros.

Rap

El rap pertenece a los géneros de música underground, como su primo hermano el trap, pero con flow. ¿Que qué es el flow?... ¿Ves lo que hace C. Tangana cuando canta? Pues todo lo contrario.

Uno de los subgéneros del rap que mayor fama ganó fue el gangsta rap, en el que los cantantes (99% negros, 1% Eminem) vacilaban de joyas doradas, bugas y/o armas de fuego In da hood. Muchos raperos de por entonces trataron de imitarlos en España, solo que la chapita de la primera comunión, el Seat León y la navajilla de cuatro dedos no causaban la misma impresión.

El rap no solo es uno de los estilos de música más pinchados en el mundo, sino que también se han popularizado las batallas de gallos. Eh, los de PACMA que toman antibióticos, tranquilitos, que no son gallos de verdad. Son freestylers que, a base de rimas, tienen que dejar al rival a la altura del PIB de Cuba. Si quieres ser el GOAT, por favor, no rimes “amor” con “dolor”: la gente quiere sangre verbal, no escuchar tus traumitas con tu ex.

Reggaetón

Aunque este post es sobre música, tenemos que cerrarlo con el reggaetón, lo más “escuchado” en España. (Advertencia: modo hater absoluto activado, el tema de las denuncias lo llevan nuestros maridos).

Bueno, decíamos “escuchado” porque la excusa oficial de sus defensores es: “El reggaetón es para bailarlo, no para escucharlo”. A ver, niños y niñas, una de dos: o son humanos más avanzados capaces de hacer que el nervio auditivo envíe al cerebro el ritmo y no la letra, o directamente tienen poco cerebro al que enviar nada.

El reggaetón es la venganza de nuestros hermanos latinos por las atrocidades de los españoles, que nos las devuelven en forma de tortura para los tímpanos. Ya se podría haber estado Colón quietecito, haberse hundido a la altura de las Azores o haberse ido a la puñetera Antártida a evangelizar pingüinos. Aunque a saber si eso habría hecho que Latinoamérica la conquistaran los italianos. O peor aún, los franceses.

Oye, que esto no es racismo, ¿eh? Que, aparte de su gente, anda que no vinieron cosas buenas de Latinoamérica: las patatas, el maíz, los tomates, el aguacate, el chocolate, la coc… ina latina en general.

Panas, PERDÓNENNOS de verdad por lo que les hicieron personas con las que nosotros no tenemos nada que ver. Pero, por favor, ya dejen rimas de “mamita-lechita” y similares, que no están en una batalla de gallos de la Edad Media.

En fin, como diría VOX con la democracia, vamos a ir terminando con esto…

Una música, un estilo

Música y forma de vestir siempre han estado más pegadas que dos siameses. Con apenas un vistazo a las pintas de alguien, ya puedes intuir cuál es su rollo (sí, nos basamos en prejuicios, pero por ejemplo dudamos horriblemente que un choni sea fan de Mozart).

En Sliwils queremos que demuestres tu pertenencia a tu tribu musical sin miedo, con orgullo, con un par de cordones estampados que hagan juego con el resto de tu atavío (outfit, para los de Tik-Tok). Así que, según lo que te haga mover el cuerpo…