Póntelos, pónselos: Los diferentes tipos de cordones
“Los cordones son mi vida”, una frase que quizá nadie haya dicho nunca fuera de nuestro almacén (y dentro igual tampoco), pero que tiene todo el valor del mundo. Los cordones dan seguridad, confianza y autoestima, al tiempo que protegen, ayudan y mejoran cualquier look. ¿Son vitales o no? Pues eso. No esperamos que nadie se grabe a fuego la frase que encabeza este párrafo, pero sí que se la tome más en serio.
Si algo tenemos claro en Sliwils es que existen tantos tipos de cordones como seas capaz de imaginar. La clasificación se abre con una división clásica, para poco a poco ir desgranando los infinitos ejemplos que puedes encontrar. Y que no cunda el pánico, que los que no encuentres ¡nos los inventamos!
Cordones planos vs Cordones redondos
El blanco o negro, el yin o el yang, el Madrid - Barça de los cordones. Hablando de fútbol, diremos que los cordones planos son los predominantes en el calzado deportivo. Clásicos también de las zapatillas de calle, las bambas, tenis o playeras. En resumen, en su practicidad y simpleza son una buena solución.
Los cordones redondos son otra historia, se trata del hermano mayor del plano. El que ha crecido, madurado y ya juega en la liga de los mayores (último símil futbolístico, lo prometemos). Utilizado del mismo modo en calzado informal, están sin embargo considerados una pieza más elegante y distinguida.
Cordones para zapatillas vs Cordones para zapatos
Pasando a limpio la lección anterior y para afianzar conocimientos (Sliwils, diseña y enseña), dejaremos claro que el calzado sport pide de un cordón que resulte fácil de atar, cómodo y elástico. En cuanto al zapato, manda más el estilo, el gusto y la gracia a la hora de lucir un modelo bien chulo.
Esa es la norma. ¿Y para qué están las normas? ¡Para saltárselas! Bueno, las de tráfico sí se respetan, pero las que recomiendan uno u otro cordón dependiendo del tipo de calzado, nos las saltamos a la torera.
Cordones lisos vs Cordones estampados
El cordón liso está ahí para quien lo quiera. Perfecto, buen rollo. De hecho, siempre ha estado ahí. Hasta hace bien poco no había alternativa, vivíamos bajo el yugo del cordón liso, monocolor… La sociedad no concebía cualquier otra opción al no poder tener acceso a ella. Los pocos intentos por decorar el cordón, sumarle fantasía, eran vistos con malos ojos.
Hoy, por suerte, todo ha cambiado. La revolución ha llegado al cordón. En Sliwils hemos abierto un abanico de posibilidades infinito, abrazando ese nuevo mundo con todas nuestras fuerzas y diseñando tantos cordones estampados como estilos hay. ¿Dónde está el final? ¿El qué? Nosotros, al igual que los fans de Los Serrano, no queremos pensar en el final.
Cordones aburridos vs Cordones Sliwils
Ya va quedando claro que los tipos de cordones distinguen también a dos tipos de persona. Los que saludan a los vecinos en el portal o los que corren al ver a uno para poder subir solos en el ascensor. Los que siguen escuchando al mismo cantautor desde hace 25 años o los que se han abierto al trap. Los de manta y peli hasta en agosto o los que improvisan plan según sople el viento.
Hay momentos para todo, lo mismo que ahora sí que hay cordones para todo. Los Sliwils son unos cordones de lo más enrollados para Converse o para Adidas. ¡Pero, ojo! Que nosotros no imponemos: también puedes usarlos para decorarte el pelo, para lucirlos en las trabillas a modo de cinturón o de llavero, para las gafas…
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